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América Borbónica

     En el espíritu de las leyes (1748) de Charles Montesquieu dice que "las Indias (Virreinatos españoles en América) y la España son dos poderes bajo un mismo amo, pero las INDIAS SON EL PRINCIPAL, mientras que España es acc...esoria" Para 1800 España tenia una población de cerca de 11 millones, mientras que su imperio americano tenía casi 15 millones de habitantes. La política de José Gálvez, nombrado ministro de las Indias en 1776, fue convertir el imperio en una fuente importante de ingresos y recursos para la monarquía española. Entre 1765 y 1771, como Visitador General de la Nueva España, introdujo medidas para promover la producción de la plata y aumentar las remisiones de rentas a España. Como ministro, su primera preocupación fue establecer el gran virreinato de La Plata (Río de la Plata) sobre bases firmes, y luego abrir los puertos americanos a un libre flujo de envíos desde la península. Durante la década de 1780 designó intendentes en todo el imperio: comenzó nombrando ocho en La Plata y termino con 12 en la Nueva España, e introdujo funcionarios asalariados para recaudar las alcabalas. La severidad con las que se aplicaron estas reformas fiscales en Perú y Nueva Granada fue la causa de la rebelión popular de Túpac Amaru en los Andes en 1780 y 1781, así como de la revuelta de comuneros en Nueva Granada. Estos levantamientos al igual que los motines de la Nueva España en 1767, fueron reprimidos por regimientos veteranos de España y por la nutrida milicia que logró reclutarse. De hecho, para América, el reinado de Carlos III se caracterizó por la creación de un nuevo Estado de naturaleza absolutista que se apoyaba en los instrumentos típicos de la monarquía absoluta europea ; un nuevo cuerpo de oficiales reclutado en parte entre los criollos jóvenes, una amplia burocracia fiscal y el reforzamiento del poder judicial. Por lo general los virreyes e intendentes (Gobernadores) eran oficiales en servicio del ejercito o de la marina, y lucían su poder acrecentado en el fomento de obras públicas.

Las reformas borbónicas fueron el gran provecho para las provincias americanas: en particular, se expandieron todos los sectores de la economía de la exportación, y aumento de la producción en regiones que hasta entonces habían sido confines, como las pampas argentinas, las plantaciones de cacao venezolanas, etc. Mejoró la calidad del gobierno. En nada más evidente que en el IMPULSO DADO A LA CIENCIA.

El lado negativo de estas reformas fue que Galvéz no disimulaba su desprecio por la elite criolla, que hasta entonces había controlado grandes sectores de la administración colonial. Desde su cargo de ministro hizo crecer considerablemente la burocracia colonial, y en casi todos los puestos nuevos asignó candidatos PROCEDENTES DE LA PENÍNSULA. Tan obvia la actitud de Gálvez, que Juan Pablo Viscardo Guzmán, jesuita peruano exiliado, habló de su "manifiesto y general odio a todos los criollos", y un crítico anónimo profetizó en Madrid desde un principio: "Gálvez ha destruido más que edificado... su mano destructora va a preparar LA MAYOR REVOLUCIÓN en el imperio americano."

BRADING, David, Apogeo y derrumbe del imperio español, Clío.